SONETO CXXIX
Garcilaso que al bien siempre aspiraste y siempre con tal fuerça le seguiste, que a pocos pasos que tras él corriste, en todo enteramente l'alcançaste, | dime: ¿por qué tras ti no me llevaste cuando desta mortal tierra partiste?, ¿por qué, al subir a lo alto que subiste, acá en esta baxeza me dexaste | Bien pienso yo que si poder tuvieras de mudar algo lo que'stá ordenado, en tal caso de mí no t'olvidaras: | que, o quisieras onrarme con tu lado, o a lo menos de mí te despidieras; o, si esto no, después por mi tornaras.

